Hirugarren Euskal-Jaia, 1967 urtekoa
Hirugarren Umien Euskal Jaia, 1967 urtean egin zen, eta lehena bezala jendetsua eta arrakastatsua izan zen, Miguel Angel Astiz eta beste askoren iritziz, behinik behin. Hona hemen garaiko kronika:
Más de una hora duro el desfile de millares de niños.
Miguel Angel ASTIZ. La Gaceta del Norte 9-V-1967
Como la primavera florida que estallaba en los manzanos y en los prados y en las hayas sobre la tierra seca, Eibar se alegró el domingo, por encima de problemas y de ruidos de industria, con millares de niños llegados de todas partes para tomar parte en la III'go Umien Euskal Jaia, la tercera fiesta vasca infantil, que cada edición va creciendo en cantidad y calidad y que organiza con singular y particular esfuerzo la S.R.C. Arrate.
Tras los pasacalles mañaneros tocados por docenas de mini-chistularis llegados de Guipúzcoa y de Vizcaya, y los de Arrate, la misa, a la que asistieron las autoridades: el templo y sus alrededores, repletos de chavales vestidos con todos los trajes, de costa y de montaña, de danza y de trabajo, típicos vascos.
La víspera había habido una gran velada en el Frontón Astelena, en la que cantaron Lourdes Iriondo, Benito Lerchundi, Javier Lete, Julian lecuona, y en el que ofreció un magnífico recital el Orfeón San Anton de Bilbao.
EL GRAN DESFILE POR LAS CALLES
C on esa manera tan eficaz de saber organizar, típica eibarresa, se montó el gran desfile desde la parroquia a la plaza, con los grupos de danzas y millares de niños, y ocho carrozas muy bien logradas, de motivos vascos, que mantuvo durante más de una hora a todo Eibar y a muchas gentes llegadas de fuera, prendidas del encanto de la demostración infantil.
Abrieron el desfile los chistularis de Villarreal, las mini-autoridades, los dantzaris del Arrate, y después una estampa magníficamente lograda con tipos y trajes – masculinos, femeninos, del pueblo, de alcaldes, bandera – de los valles vasco-pirenaicos de Salazar y Roncal de Navarra, presentada por el Colegio de la Providencia, y que por la singularidad de los trajes, fielmente reproducidos en miniatura, llamó grandemente la atención.
Presentaron carrozas muy bien logradas, de temas vascos – y hasta una de tema espacial -, el Club Juvenil Izarra, los Colegios de Mercedarias y de La Salle, los niños de las Escuelas de Ipurúa, la Empresa Alfa, La Sociedad Arrate, la Ikastola, el Colegio del Sagrado Corazón y la parroquia del Carmen: había concurso, muy bien dotado, cuyo primer premio ganó la Ikastola, con su representación Sukaldea, y el segundo Alfa, con Basarri; los bohemios pintores vascos, la pelota, la danza, los ferrones, la canción, estuvieron muy bien representadas en carrozas que costaron sin duda mucho esfuerzo artístico, económico y de trabajo, demostrando el nivel de Eibar. (...)
