Lehen Euskal Jaiaren Kronika
Aurten Euskal Jaiaren XL edizioa betetzen da. Gaur egun Klub Deportiboak egiten du antolakuntza lan handiena. Urteetan mantendu du bizirik Euskal Jaia eta, gaur egun ahal dugun neurrian, Arrate Kultur Elkartetik laguntza txikitxoa eskeintzen diogu antolakuntza lanetan.
Hasierako urteetan Arrate Kultur Elkartea izan zen Eibarren Euskal Jaia martxan ipini zuena eta antolakuntzaren ardura nagusia izan zuen elkartea.
Garaiko, 1965 urteko, Euskal Jaiaren ideia bat izateko. elkartearen artxiboan aurkitu dugun paper horiska batetik errekuperatu egin dugu garaiko La Gaceta del Norte egunkarian argitaratu zen Miguel Angel Astiz kazetariaren kronika hau:
Millares de niños, con trajes típicos llenaron Eibar en la Fiesta Vasca Infantil
Miguel Angel ASTIZ. La Gaceta del Norte 1-VI-1965
En el Día del Niño, Eibar quiso montar, como saben hacer la cosas en Eibar, una gran fiesta vasca infantil en la que los niños deberían ser el destacado relieve de la jornada.
A Eibar fueron grupos infantiles de Lezo, Baquio, Bilbao, Placencia de Las Armas, San Sebastián, Galdacano, Elgueta, Elgoibar, Deva, Ondarroa, Deusto y Luchana, de dantzaris que se unieron a los de Eibar. Y grupos de chistularis de la Academia Municipal de Bilbao, de la Agrupación Gazte-Zar de Mundaca, del Ayuntamiento de Villareal y del veterano Luis Torre de Baracaldo. Y otros grupos con tareas concretas en la fiesta, como los humorelariak de Zarauz, el Coro de la misma villa guipuzcoana, versolaris y levantadores de piedra.
Junto a estos grupos concretos llegaron centenares de niños vestidos con los más diversos trajes típicos, apareciendo por las calles desde la reproducción del antiguo miquelete, hasta la lechera, o el aña, con una sencillez y una autenticidad, que evitó en todo momento el más mínimo atisbo de carnavalada.
Era el primer Festival Infantil Vasco que se asentaba en Eibar, realizado por la Sociedad Cultural y recreativa de Arrate, y dentro de ella por Julio Sarasua, promotor y gran realizador de la fiesta, hijo de una familia de gran raigambre eibarresa, y que ha prestado a la Villa muchos e importantes servicios.
CONCENTRACION, PASACALLES, MISA
Ya para las nueve de la mañana, habían llegado a Eibar muchos centenares, que luego serían millares, de niños de todas partes, y la plaza del 18 de julio, corazón de Eibar, se llenó de pequeños, desde la edad de chupete hasta los doce o trece años, que comenzaron la jornada bailando alegres a la hora del pasacalles, llenas las aceras y los balcones de público, presenciando el singular espectáculo de la grey infantil en fiesta.
A las diez, misa. No pudo celebrarse en el Frontón Astelena, como estaba previsto, y fue una lástima, porque fueron muchos los que no pudieron entrar en la parroquia donde se celebró el santo sacrificio.
DESFILE DE CARROZAS
Tras la misa, las calles volvieron a alegrarse con la música del chistu, el tamboril, y los acordeones, y comenzó el desfile de carrozas hechas por colegios y entidades de Eibar, con auténtico buen gusto presenciado por una gran cantidad de público. El Jurado otorgo los premios, le primero a Eskontzia comitiva de antigua boda vasca del Colegio Aldatze, el segundo a Arrantzalek, tema de pescadores, de la Sociedad Arrate, el tercero, a Ikastoka! tema de enseñanza escolar presentado por las Escuelas Vascas de Eibar, el cuarto a la carroza de la Hermandad Ixtulaburu, el quinto a la carroza Euskal-Erri'ko frutuak, de los Padres Carmelitas, el sexto a Guipuzcoa del Colegio Acitain de la Salle, y finalmente el séptimo premio a Borda'ko pilota jokua, de un tema de pelota.
EL FESTIVAL DEL ASTELENA
En el viejo frontón Astelena eibarres, rebosante de niños tuvo lugar el Festival: los grupos de Zarautz presentaron primero a unos pequeños versolaris, los Hermanos Echave, después a un magnífico Coro que logro justamente enormes ovaciones, luego a humoristas infantiles, se bailaron danzas populares y se termino con un aurreskua y el canto del Agur Jaunak. Hubo un fino detalle: el rezo del angelus por un niño vestido de sacerdote, con su bonete y su breviario.
Terminado el Festival, los veintiocho grupos que habían acudido a él, se desparramaron por Eibar, para ejecutar sus danzas por calles y plazas, entre el público que iba y venía de un lado para otro para verlos.
LA COMIDA Y EL ESPIRITU DE EIBAR
Los eibarreses lo organizan todo muy bien. No pudieron evitar la lluvia que cayó torrencialmente en algunos momentos, pero pequeños y grandes la aguantaron y ni un solo momento decayó el color, la alegría popular y la música, hasta que el cielo se apiadaba y volvía a cerrar los grifos.
A la hora de comer, los de la Sociedad Arrate, organizadora del día infantil vasco, tuvieron problema: eran quinientos los niños de diversos grupos invitados y había ofrecimiento para darles de comer en casas particulares, para más de mil doscientos.
Hubo que resolver quién se llevaba a los pequeños, y se resolvió que fueran, no a las calles céntricas e importantes, sino a las casas de los eibarreses de los alrededores, a las más sencillas, para dar testimonio social, y satisfacción a los muchos trabajadores que pidieron acoger a los niños, alguno de ellos con solicitud de diez pequeños para comer con los suyos: hermoso mediodía de hermandad cordial brindado por el espíritu eibarres.
DANZAS, POR LA TARDE
Toda la tarde, con algunos pequeños intervalos cuando la lluvía caía más fuerte, la plaza del 18 de julio fue escenario de un concurso de baile para niños y un desfile de los grupos que fueron ofreciendo un recital extenso y muy interesante de danzas, tambien de juegos rurales como los levantadores de piedra de Zarauz, todo un espectáculo que llevo a las cercanías del tablado a docenas de fotógrafos y de aficionados al cine, para tomar vistas del espectáculo.
Y luego, romería: hasta el toque de oración: biribilketas, kalejiras, jotas, puerros por todas partes: hasta los mayores se echaron a bailar al son de los chistu de los chavales.
Los de la Sociedad Arrate pueden estar satisfechos. Y Eibar desde luego. La fiesta dejo grato, alegre, imborrable recuerdo.
Nik beste zalantza bat. Argazki hori ez da Arraten?
Lasai, ez cetsagu inori gezurtxua kontauko :-)